Boludo es tal vez una de las palabras más representativas del argentino más autóctono. Es una palabra muy versátil ya que se usa en confianza entre amigos (para reemplazar el nombre de la persona), o como un insulto. Así que dependiendo del contexto, boludo puede tomarse a bien o a mal.
Como insulto, boludo puede ser sinónimo de tonto, gilipollas, estúpido o pelotudo.
Hablado con amigos, es una palabra amigable y cercana que se dice con mucha confianza y en entornos coloquiales.
En resumen: si no hay confianza, no le digas boludo/a